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StockX acusa a Nike de tratar de dinamitar el mercado de la segunda mano

Por Jaime Martinez

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Photo Credits: StockX.

En el marco de la encendida batalla legal que mantiene enfrentadas ante los tribunales norteamericanos a Nike y a la plataforma online especializada en la compraventa de artículos singulares y coleccionables StockX, a comienzos de esta misma semana asistíamos a la apertura de un nuevo capítulo, tras la presentación por parte de la pure player digital de sus alegaciones en contra de las nuevas acusaciones vertidas en su contra por parte de la multinacional deportiva.

Haciendo una breve recapitulación que nos permita ponernos en situación, el pasado 3 de febrero de 2021 Nike presentaba ante el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito Sur de Nueva York, una demanda contra StockX por infracción de patentes y de los derechos de las marcas registradas de Nike, a cuenta de la creación y la comercialización por parte de la plataforma, y sin su consentimiento, de una serie de coleccionables NFTs publicitados con el nombre y con distintos diseños de Nike y de otras de sus marcas asociadas. Acusaciones a las que además desde Nike sumaban una nueva declaración judicial, ya a fecha del pasado 10 de mayo, mediante la cual acusaban igualmente a SotckX de fraude al consumidor, al permitir la venta desde su plataforma de artículos falsificados, y que no obstante se habrían encargado de validar como auténticos y originales.

Unas imputaciones estas últimas que terminaban cristalizando en la presentación, el pasado 25 de mayo, de una ampliación de su demanda original contra StockX, como consecuencia de unas acusaciones a las que de manera pública ya respondieron de enérgica manera desde la plataforma el pasado 11 de mayo; en una posición que ahora han pasado igualmente a defender ante el tribunal responsable de dirimir este enfrentamiento, con la presentación de sus alegaciones a la causa. Un escrito al que hemos accedido desde FashionUnited, que presentaban con fecha de este mismo lunes 6 de junio de 2022, y desde el que desde StockX niegan todas y cada una de las acusaciones en su contra reclamadas por Nike.

Photo Credits: StockX.

Querer dinamitar el modelo de reventa

Siendo dos cuestiones que, a pesar de lo que pueda parecer en una primera aproximación a la causa, se encuentran estrechamente ligadas, desde su escrito —de 122 páginas— desde StockX no solamente entran a refutar todas y cada una de las imputaciones de Nike, sino que igualmente no dudan en lanzarse a atacar a la multinacional deportiva. Compañía a la que acusa, primero, de no entender el funcionamiento de los NFT ni de comprender todas las posibilidades que encierran estos coleccionables digitales; y segundo, de tratar de minar y de socavar todo el modelo comercial de la compraventa de artículos de segunda mano, mediante sus acusaciones, argumentan que infundadas, en contra de su sistema de verificación de artículos originales.

A este respecto, “el comportamiento anticompetitivo de Nike sofocará el mercado secundario de la compraventa y perjudicará a los consumidores”, argumentan desde StockX en sus alegaciones presentadas ante el tribunal de distrito de Nueva York. “Más allá de sus amenazas al uso de los NFT para la comercialización y el acceso a bienes físicos, las acusaciones de falsificación y de publicidad engañosa de la demanda ampliada de Nike suponen una afrenta para todo el mercado de la reventa”. “A diferencia de la gran mayoría de los marketplaces, que no inspeccionan físicamente todos los productos que venden en sus plataformas o en sus tiendas, StockX requiere que todos los productos vendidos a través de su plataforma pasen por su proceso de autentificación, y ofrece una política de reembolso para el caso, poco frecuente, de que un producto falsificado pueda terminar en las manos de un consumidor”.

El contar con esta serie de mecanismos de garantía, sostienen desde la plataforma de comercio online, “socava por sí solo cualquier acusación de que StockX está comercializando con dichos bienes a sabiendas o intencionalmente”. Así pues, “si Nike está dispuesta a presentar estas reclamaciones contra StockX, a quien ha llegado a elogiar como un ‘buen actor’ alineado con su lucha contra la falsificación, entonces ningún marketplace está a salvo”. A la vista de esta demanda, esgrimen desde StockX, “todo el mercado secundario se encuentra en un permanente peligro, sin contar con ninguna capacidad para que los marketplaces o los revendedores se protejan a sí mismos de demandas frívolas”. Siendo a este respecto, subrayan, “el verdadero motivo de Nike, de infligir un daño al mercado de la reventa en todo su conjunto, obvio”.

Photo Credits: StockX.

No entender el funcionamiento de los NFT

Entrando, levemente, a desgranar las principales reclamaciones que desde StockX han realizado contra Nike a través de sus alegaciones, en lo que atañe al motivo original de la demanda de Nike contra la plataforma, como bien señalábamos desde StockX argumentan que los equipos de la multinacional deportiva no terminan de entender el funcionamiento de los NFT, o tokens no fungibles. Sosteniendo en contra que sus modelos “Vault NFT” no infringen en ningún momento los derechos de marca ni de patentes de Nike, sino que se muestran como una herramienta o una suerte de resguardo, con el que permiten tanto mejorar la experiencia de compra de los clientes y usuarios de SotckX, como el rendimiento y los principios de sostenibilidad ligados a su modelo exclusivo de reventa.

A este respecto, y de manera más detallada, desde StockX apuntan en sus alegaciones a que la plataforma “utiliza legalmente los NFTs para permitir a los usuarios realizar transacciones de manera más eficiente con productos auténticos”. “Los NFT de StockX Vault no son en absoluto ‘productos virtuales’ o zapatillas digitales”, sino que más bien, “cada Vault NFT está vinculado a un bien físico específico, que ha sido autentificado por StockX”. De este modo, “los consumidores compran un Vault NFT y tienen dos opciones con respecto a la posesión” de ese bien físico al que están vinculados, o “retener la posesión digital de Vault NFT y dejar el bien físico autenticado en la bóveda de alta seguridad, con atmósfera controlada, de StockX”, o bien “tomar la posesión física del artículo”, en cuyo caso el NFT se elimina de la carta de activos digitales del cliente.

“El beneficio de adquirir la posesión de un Vault NFT en lugar del artículo almacenado” en las instalaciones de la compañía, está en que “el propietario puede comercializar en el futuro con él sin incurrir en costes de transacción, retrasos o riesgos por daños o pérdidas asociados con el envío de zapatillas físicas”. Siendo este un “proceso novedoso” con el que dicen haber logrado “innovar y acelerar en el proceso de la comercialización de productos físicos”, que ha sido especialmente diseñado como respuesta al “creciente grupo de consumidores”, que “ya constituyen una parte importante de la base de clientes de StockX”, que invierten y comercializan con una serie de artículos y coleccionables, pero sin intención alguna de llegar a “tomar posesión física de los productos para su uso”.

Photo Credits: StockX.
Photo Credits: StockX.

Defensa de su proceso de verificación

Mientras tanto, en lo que atañe a las acusaciones de vender, de manera intencionada y fraudulenta, artículos falsificados, unas reclamaciones que desde Nike sostienen en el hecho, supuesto, de haber adquirido hasta 4 modelos distintos de zapatillas Nike falsas en la plataforma de StockX, desde el mismo marketplace se encargan de refutarlas sembrando de dudas todo el argumentario sostenido por Nike. Defensa de la que igualmente hacen uso para defender y reivindicar tanto su sistema de verificación, como las importantes inversiones, de millones de dólares, que han realizado como parte de su compromiso a la lucha contra la proliferación de productos falsificados. Una batalla para la que dicen emplear a más de 300 auntentificadores desde los once centros de autentificación con los que disponen repartidos por las diferentes partes del mundo, en lo que ya ha evitado, valoran, que más de 60 millones de dólares en zapatillas falsificadas se hayan llegado a vender a través de su plataforma.

“La demanda de Nike no es más que un intento engañoso y sin fundamento de interferir en un método innovador y eficiente para comercializar dentro de la cultura actual, como parte de un mercado secundario que es cada vez más popular y lícito para la venta de zapatillas y otros productos”, tratan de sintetizar desde StockX. A este respecto, y sumando ambas causas, “la demanda de Nike amenaza el uso legítimo de NFTs como resguardos no solo por parte de StockX, sino también por parte de otros innovadores que también usan NFTs para rastrear la propiedad de otros bienes físicos almacenados bóvedas, como piezas de arte, whisky y vino”. A este respecto, “el uso de NFT para rastrear digitalmente la propiedad de productos físicos no solo es legal, sino que también aumenta la eficiencia y reduce los costos para los consumidores, promueve la sostenibilidad y no debe ser alterado”.

De otro lado, “también son sorprendentes las significativas lagunas de los diferentes versiones de Nike con respecto a los presuntos zapatos falsificados que supuestamente compraron en la plataforma de StockX”. Dado que “Nike no ha presentado ningún detalle sobre cómo identificó las supuestas falsificaciones como no auténticas; cómo llegó a poseer estos zapatos; si está en disposición de verificar la cadena de custodia de las zapatillas desde el mismo momento de la compra hasta el momento en que presentó su ampliación de la demanda; el si ella o sus empleados tuvieron algo que ver con la entrada de estas zapatillas a la plataforma de StockX”; o “por qué Nike no intentó notificar a StockX o devolver los zapatos al descubrir supuestamente que eran falsificados” haciendo uso de esa garantía que ofrece el marketplace.

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